Tal vez no te extrañe, tal vez simplemente tenga miedo.
Miedo de no volver a tener lo que teníamos. Miedo de no volver a conocer a
nadie como tú. A nadie que se sienta bien, que se sienta real. O no sé si real,
sólo... Con quien me pueda identificar, a quien pueda entender. Alguien con
quien me sienta cómoda y acogida, que se sienta como un hogar o que puede
llegar a serlo fácilmente. Y sé que es estúpido, que soy demasiado joven como
para nunca encontrar a alguien así de nuevo y nunca tener lo que teníamos, pero
no puedo dejar de pensarlo. O tal vez no quiero que sea con alguien que no seas
tú. O tal vez lo que pasa es que no puedo estar en paz con el tema, porque se
siente como una traición de tu parte, o de la mía. Tal vez sea que merecíamos
mucho más de lo que fue y no pueda no importarme eso. O tal vez sea que no
puedo o no quiero renunciar al pasado. O tal vez sea que quiero tener esta
épica historia de amor, porque soy una romántica. O tal vez sea que no quiero
renunciar a esa visión que siempre tuve desde el minuto en que te conocí. O tal
vez sea que no quiero renunciar a todos los planes de vida que ya me había
hecho contigo. O tal vez sea que tengo miedo de no volver a ser feliz, o de ser
feliz sin ti. O tal vez no, tal vez simplemente te extraño y estemos hechos
para estar juntos, de cualquier forma.