lunes, 11 de septiembre de 2017

Al terminar ese día

El momento en que llegué a mi casa ese día fue cuando me golpeó. Fui a saludar a mi hermano e intentar decirle algo de lo que se perdió en todo ese día. Ahí fue la primera vez que entendí que no tendría nunca más uno de tus abrazos, que no volverías a sonreírme, que jamás volverías a decirme que envidiabas mis paletas, que nunca más volverías a decirme que me vestía muy acorde a mi edad, que no volverías a decirme que era muy cariñosa, que jamás volvería a escucharte decirme "te quiero" al oído. Y en ese momento mi corazón se desgarró.

0 comentarios :

Publicar un comentario